Crónica de la III Olimpiada filosófica: conferencias y final

Finalistas de la III Olimpiada filosófica de Castilla y León

Un año más, el trabajo de todos los profesores y alumnos se ha visto reflejado en la final de esta III Olimpiada filosófica, que coincidía además con el III Congreso de la enseñanza de la filosofía en Castilla y León. Una ocasión excepcional para que alumnos, familias y profesores hayan podido encontrarse en torno a un eje común: la reflexión filosófica. Han sido dos días muy intensos, y la cantidad de material generado (texto, imágenes, vídeo…) nos obliga a publicar hoy tan sólo un extracto de todo lo acontecido el viernes 4 y el sábado 5. Los textos y el vídeo serán editados a lo largo del mes de abril y publicados íntegramente en la primera semana de mayo. Mientras procesamos y organizamos toda la información, podemos quedarnos con esta panorámica general de esta final de la III Olimpiada filosófica de Castilla y León.

Viernes 4 de abril: actividades filosóficas

La inauguración de la Olimpiada contó en esta ocasión con unas palabras de bienvenida de D. Luis Santos Domínguez, decano de la Facultad de Filosofía que subrayó lo que representa para la Facultad acoger esta tercera Olimpiada. A continuación, D. Alfredo Marcos Martínez, director del departamento de filosofía de la Facultad destacó el contenido filosófico de esta olimpiada y la importancia de su consolidación y desarrollo. En tercer lugar, D. Leandro González Martín, en representación de la Dirección General de Calidad, Innovación y Formación del Profesorado, nos transmitió el interés de su Dirección General por una actividad como la Olimpiada que fomenta la calidad y la excelencia entre el alumnado.

Tras la inauguración, la primera conferencia corrió a cargo de D. José Jiménez Lozano. En su conferencia, Un encuentro temprano con Descartes, defendió el valor de la educación para la transmisión del saber entre distintas generaciones. En la misma otorgó un papel esencial a todas aquellas materias y asignaturas que facilitan y posibilitan «encuentros tempranos» con «rostros pálidos» como Descartes y otros tantos científicos, literatos y artistas que nos ayudan a entender mejor nuestro presente.

Tras un descanso mínimo, se abrió el turno de comunicaciones, en el que se contó con las siguientes intervenciones:

  • Dña. Carmen Santander (¿Gusanos bípedos o mis alter-ego?) realizó una presentación didáctica y muy amena de la filosofía de Schopenhauer, destacando aspectos concretos de su vida relacionados con su pensamiento. Su comunicación giró en torno a la aparente contradicción entre el egoísmo que nos puede llevar a despreciar a los demás y el sentimiento de compasión (fundamento último de la moral) que nos hace considerarlos como iguales.
  • D. Pedro Herráiz (Ecotectura humana) planteó una interesante discusión en torno a la necesidad de construir una nueva identidad para el ser humano. Jugando con las imágenes de Arlequin (el personaje de la comedia del arte que es tan sólo máscara, el payaso tonto) y Pierrot (el payaso listo), propuso dos vías distintas para esta construcción, refiriéndose a Heidegger («antes que construir hay que habitar») y Habermas.
  • D. Juan Manuel Delgado (Nadar antes de lanzarse al agua) subrayó la dificultad intrínseca de la pregunta por la naturaleza humana: ser hombre y querer investigar en torno a qué es ser hombre es como querer nadar antes de lanzarse al agua. Como complemento, ofreció una panorámica de diversas concepciones antropológicas, fijándose en los grandes autores de la historia de la filosofía.
  • D. Jacinto Sánchez (El ser humano… eso no puede funcionar nunca) planteó de una forma tan ingeniosa como aguda las consecuencias de enfocar al ser humano desde un punto de vista funcionalista. Enlazando con las recientes aportaciones científicas de disciplinas como la neurobiología, advirtió del peligro de «maquinizar» al ser humano, de convertir en un objeto que la tecnología puede manipular a su antojo.

Como colofón a una mañana llena de ideas, argumentos e interrogantes, se planteó un debate abierto y participativo en torno a la siguiente pregunta: ¿es el hombre un animal religioso? El debate fue moderado por D. José Luis Sandoval. Comenzó con una presentación general de las ideas y corrientes más importantes. Partiendo de datos de la realidad, expuso las cuatro posturas básicas en torno a la existencia de Dios, y desarrolló también tres grandes corrientes de pensamiento (racionalismo, empirismo y humanismo) exponiendo su propio punto de vista. A continuación comenzó un debate frío en un primer momento, en el que sólo intervenían los profesores. Sin embargo, a medida que salieron a la luz diversas críticas y argumentos, los alumnos participaron, sin que hubiera tiempo suficiente como para contestar todas las preguntas que se plantearon. En cualquier caso, esto no impidió que se abordara el tema de un modo respetuoso, tolerante y crítico.

Alumnos y profesores pudieron continuar ese mismo debate por la tarde, cuando se inició una visita turística a la ciudad de Valladolid. Tras un descansado recorrido panorámico en el autobús turístico de la ciudad, pudimos contar con la ayuda de una guía que explicó a los alumnos y profesores presentes los edificios más emblemáticos del centro. Finalmente, se pudo visitar una parte del museo nacional de escultura policromada.

Sábado 5 de abril: Final de la III Olimpiada filosófica

Comenzó la mañana con unas breves palabras de bienvenida dirigidas a los alumnos por parte de Alfredo Marcos (Jefe del Departamento de Filosofía de la Universidad de Valladolid) y Miguel Santa Olalla (Presidente de la Asociación Olimpiada filosófica). Los alumnos estaban deseando ya conocer el tema sobre el que deberían escribir el ensayo de la final, cuyo planteamiento partió de un fragmento de Víctor Gómez Pin y fue el siguiente:

Al tiempo que los alumnos trataban de escribir sus mejores ideas y argumentos, tuvo lugar la segunda asamblea de la asociación, en la que se presentó el trabajo organizativo realizado para esta tercera Olimpiada, así como las cuentas de la asociación, tratándose otros asuntos importantes como la presencia de la filosofía en primero de bachillerato. A las 11:30 comenzaba la corrección de los ensayos, mientras los finalistas y el público asistente pudieron escuchar la conferencia de D. Víctor Gómez Pin: «Entre lobos y autómatas«. En su conferencia hubo múltiples alusiones al mundo de la ciencia, el arte y la filosofía, y se defendió la irreductibilidad del ser humano a la animalidad. Igualmente, se criticó el intento de asimilar al ser humano con las máquinas.

A continuación los 3 finalistas defendieron sus ensayos:

  • Irene García Álvarez (IES La merced) defendió la libertad como una cualidad específicamente humana. Ser libres nos diferencia de máquinas y animales, y renunciar a esa libertad es ya una forma de decidir, es decir, una forma de ser humano y por tanto distinto a la máquina y al animal.
  • En segundo lugar, Laura García Turrión (IES Fernando de Rojas) argumentó que la dimensión cultural del ser humano le aleja completamente de la animalidad y de las máquinas. El ser humano crea problemas, pero trata de encontrar soluciones, algo que es impensable en el caso de las máquinas.
  • Raúl Moreno Almendral (Colegio Maestro Ávila) realizó una defensa de la especificidad del ser humano llena de referencias a la historia de la filosofía. Evitando también cualquier reduccionismo, defendió una concepción humanista: no se trata de que el pasado represente nuestra animalidad y nuestro futuro sea la máquina. La humanidad es auténtico pasado, presente y futuro.

Finalizada la defensa de los ensayos, el jurado se retiró a deliberar. El resto de los asistentes pudo disfrutar de una pequeña sesión a cargo de D. Pablo Javier Pérez López sobre la relación entre filosofía y poesía. El ser humano vive entre la filosofía (el afán teórico y la conceptualización) y la poesía (la vida irracional que fluye y se disfruta, la vida vivida). Finalizada esta presentación y antes de la entrega de premios, hubo un lugar para completar los agradecimientos que se recogen a continuación:

  • La Dirección General de Calidad, Innovación y Formación del Profesorado de la Consejería de Educación de Castilla y León ha colaborado en la organización de la Olimpiada, tomando conciencia de que esta actividad pretende promover y destacar la excelencia entre el alumnado de nuestra autonomía. Su predisposición y buena voluntad son una buena muestra han quedado patentes y ojalá puedan seguir presentes en futuras ediciones.
  • El Departamento de Filosofía de la Universidad de Valladolid ha estado presente a lo largo de toda la organización. Su labor no sólo consiste en acoger la final, sino en colaborar en aspectos como la selección de ponentes, gestiones para los conferenciantes. Gracias a ellos se va estableciendo una relación más que necesaria entre la enseñanza secundaria y la universidad.
  • El Ayuntamiento de Valladolid, a través de su Concejalía de Cultura, Comercio y Turismo ha sabido dar a la Olimpiada una acogida excepcional, convirtiendo en una agradable experiencia lo que para algunos alumnos era su primera visita a la ciudad. Esperamos poder contar con esta misma hospitalidad en futuras ediciones.
  • Para terminar con el apartado institucional, hay que destacar el apoyo recibido por la Fundación Germán Sánchez Ruipérez y el CITA. Ambas instituciones de Peñaranda de Bracamonte han valorado positivamente esta iniciativa contribuyendo a dar una nueva dimensión a los premios
  • En el apartado editorial, hay que destacar la implicación de editoriales como Everest (que nos ayuda desde la primera edición), Edebé, McGraw Hill y la Asociación de libreros de León. Además, el esfuerzo de una librería como Margen merece también el reconocimiento de todos los que participamos en la Olimpiada.
  • Para empezar a todos los alumnos y profesores que han participado en la Olimpiada. El entusiasmo y dedicación de los profesores en la orientación de los trabajos y el buen hacer y la reflexión seria que son capaces de ofrecer los alumnos son el ingrediente esencial de toda esta actividad. Sin los futuros filósofos y quienes les prestan alas, la Olimpiada filosófica sería impensable. En especial se reconoció el esfuerzo realizado por profesores y alumnos de Peñaranda de Bracamonte, Medina de Rioseco y Benavente, que se acercaron con sus alumnos a la jornada previa de conferencias.

Para terminar, se realizó la entrega de premios. Profesores, centros y alumnos recibieron sus correspondientes diplomas de participación. Hecho esto, se proclamaron los vencedores de esta tercera Olimpiada filosófica de Castilla y León:

  • Primer puesto de la Olimpiada filosófica: Irene García Álvarez, del IES La Merced (Valladolid)
  • Segundo puesto de la Olimpiada filosófica: Raúl Moreno Almendral, del Colegio Maestro Ávila de Salamanca.
  • Tercer puesto de la Olimpiada filosófica: Laura García Turrión, del IES Fernando de Rojas (Salamanca)

Entregados los premios correspondientes, se realizó una sesión de fotos y todos los asistentes pasaron a disfrutar de un vino español donde intercambiar impresiones y experiencias de todo lo vivido en estos dos días, quedando ya emplazados a la celebración de la IV Olimpiada filosófica, cuya final se desarrollará en la Universidad de Salamanca.

Comparte en tus redes